Mexicanos similares

Arturo Reyes González | Tiempo de Veracruz | abril 4, 2011 at 9:48 AM

Arturo Reyes González

Estoy seguro que lo había percibido pero no estructurado en una idea concreta, lo que se debe a que no cuento con el beneficio de ser parte del sistema de salud oficial.

¿A usted no le parece que las “pequeñas” farmacias de genéricos, ahorro y similares que ahora ofrecen consulta medica gratuita o a muy bajo costo en comparación con la que ofrecen los médicos privados se han multiplicado sin distinción de zona o región?

¿Esto ha sucedido en su rumbo, por su barrio o colonia, en el trayecto a su trabajo o domicilio o a la vuelta de la esquina? Me parece que sí.

Al respecto, la nota publicada el día de ayer en el periódico Reforma ejemplifica perfectamente lo anterior.

Con el titulo “Prefieren pagar, que a sector salud” se relata la experiencia de la ciudadana Clara de Jesús Contreras, quien expresa que al menos para ella es mejor acudir a un consultorio de bajo costo de una farmacia, pues asegura que será atendida en unos minutos y hallará el medicamento adecuado, en lugar de esperar horas en el IMSS, con el riesgo de que no tengan existencias de medicinas.

¿También le ha venido a la mente información de periódicos, noticieros de radio, experiencias de vecinos o familiares o charlas de personas en el transporte público donde se comenta que efectivamente no hay medicinas en las farmacias del ISSSTE, por poner un ejemplo?

Clara, habitante de Monterrey, continúa la charla destacando que es derechohabiente del Seguro Social y, por lo tanto, paga para recibir ese servicio, pero prefirió desembolsar 35 pesos por la consulta y otros 100 por las medicinas para que atendieran a su hijo de cinco años en Farmacias Similares.

Lo anterior reafirma la idea de que miles de mexicanos, pese a que financian los servicios del Sector Salud, como el IMSS, ISSSTE y Seguro Popular, prefieren pagar para ser atendidos en consultorios de Farmacias Similares, Del Ahorro, de Multigenéricos y GI, entre otras.

 

El caso en cifras.

 

Nada más para el caso de las Similares, con una década de vida, brinda más de 40 millones de consultas al año, lo que representa una tercera parte de las consultas externas del IMSS y el 80 por ciento de las del Seguro Popular.

 

Tan sólo en 2010, el Seguro Popular otorgó 56 millones 28 mil 217 consultas a sus afiliados, mientras que Similares brindó 45.2 millones de consultas.

 

De acuerdo con cifras de esta empresa, tan sólo entre 2009 y 2010, año en que entraron en vigor las restricciones a la venta de antibióticos, el número de consultas se incrementó cerca del 10 por ciento.

 

Así es que los afiliados al IMSS, ISSSTE y Seguro Popular, que tienen derecho a consultas médicas y medicinas gratuitas, han optado por acudir con los médicos de Farmacias del Ahorro, Farmacias de Multigenéricos y otras por el estilo.

 

Desconozco si los encargados de dichos consultorios tienen la suficiente capacidad y preparación como para hacerse cargo de la salud de millones de mexicanos, al menos como los médicos del IMSS o el ISSSTE, pero el hecho es que están dando consulta y la gente acudiendo a ellos.

 

La secretaria de salud y la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) son los encargados de regular la actuación de este tipo de negocios. Hasta ahora no hemos leído o escuchado información al respecto, pero insisto, mientras tanto somos muchos los que utilizamos sus servicios en caso de requerir una inyección, presentar un cuadro de gripa, fiebre o dolor estomacal, entre muchos otros.

Es la realidad, nuestra realidad y el reflejo de los rezagos que hay en el acceso a la salud pública, eso sin ocuparnos de la crítica y delicada situación financiera por la que atraviesan.

Triste y lamentable es entonces la situación de nuestras instancias nacionales de salud, las que ahora resulta que son superadas por el mismo doctor Simi. ¿Tan mal están? ¿Le parece?

A ese ritmo, no dudemos que pronto el dueño de las farmacias de similares, Víctor González Torres, vuelva a pensar en ser candidato (sin partido político, claro) a la Presidencia de la República, o ya de jodido a secretario de Salud.

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